martes, 24 de diciembre de 2013

Por qué no creo en La Navidad


Ya por el mes de Septiembre más o menos, me doy cuenta que el año se fue volando y que pronto es Navidad. Esto en lugar de alegrarme me deprime, por el tráfico, el gasto, la pelea por dónde pasar tan lindo día, y las pocas ganas que tengo de ver a gente que cree que ese día debo querer verlos.

Y es que gracias a que la religión católica decidió celebrar el cumpleaños de Jesús en esa fecha, y siendo la mayoría de mis conocidos católicos apostólicos y romanos, en Diciembre se llenan de un “espíritu navideño” desbordante, digno de la familia Flanders. Y en este punto es donde me pregunto, si Jesús nace el 24 en sus corazones, en que órgano pasa la adolescencia y sus 33 años de vida??

Veamos, por qué carajo la gente cree que el 24 debe ser amable y los otros 364 días del año está bien ser unos perfectos imbéciles?

- No creo en el vecino que pone lucesitas con música navideña en el pino de su patio, mientras que todo el año parquea el carro al frente de su casa solo por joder al otro vecino con el que tiene pito.

- No creo en la prima que se viste de ayudante de Santa y saca en bandejas de plata el pavito recién horneado, lo pone sobre el mantel brillante engalanado con la más fina vajilla, rodeada de su hermosa familia sonriente para la foto de postal, mientras que todo el año deja a sus hijos almorzando solos porque le fastidian las conversaciones infantiles, los derrames en el mantel y se le pasa la novela que la hace soñar estar en brazos de otro.

- No creo en el chat del colegio, en donde las madres dejan empalagosos mensajes sacados de Google o de algún versículo que jamás entendieron bien, mientras que todo el año son incapaces de devolver un saludo amable, ceder el paso en la fila, o simplemente sonreír.

- No creo en los parientes que esperan que este día la familia pase unida, mientras que todo el año construyen barreras de envidia, críticas no constructivas y egoísmo.

- No creo en los amigos de antaño que cuelgan imágenes y frases en sus múltiples redes sociales, mientras que todo el año han ignorado las preocupaciones, alegrías o miedos de sus contactos, aun cuando se enteran perfectamente de lo que les pasa, precisamente gracias a sus redes sociales.

Así que no creo en la Navidad al igual que no creo en las fiestas de graduación, los matrimonios pomposos, ni las fotos familiares hechas en estudio. 

Por eso, así como dice la canción: "... I Just believe in me, Yoko and me..", solo creo en mi tribu y en mí, porque es mejor emular a Lennon que al estúpido Flanders.

1 comentario:

  1. Maravilloso amiga....así me siento aunque demuestre lo contrario x que no me queda otra muchas veces...déjame decirte que ya no soy católica solo creo en jesús me da igual el día q nació me importa el mensaje que dejo. Pero por mi hijo y contagiar un poco de alegría contribuyo a esto...llevo dos años muy duros....pero solo por el se me hace mas llevadero. Gracias

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un café siempre da de qué hablar...